en los capítulos que siguen cuán chocante es la irrupción del mensaje de Jesús. No deja nada intacto: insiste en cambios vitales no sólo en los individuos (muchas religiones en Efeso pretendían lograr «conversiones» personales, y lo hacían sin caer en descrédito ante otras religiones o ante el Estado), sino también en las estructuras que esclavizan y engañan a la gente. Es decir, el aspecto religioso de la vida está tan interrelacionado con otros aspectos, económicos, cívicos y legales—aun en nuestro